top of page

Sanando en la experiencia del aborto

Pasar por la experiencia de la pérdida de un hijo mientras estaba en gestación, tanto si ha sido decidida como no, puede haber dejado una herida que el tiempo por sí solo no cura. Puede haber muchas emociones y sentimientos que no han sido expresados ​​más que a través del dolor del cuerpo.

 

Tanto el cuerpo como el corazón y el espíritu agradecerán sentirse en perfecta armonía y en paz, a pesar de la muerte muy precoz de este hijo/a.

 

La experiencia inexplicable, desgarradora y/o imperdonable de un aborto también puede convertirse en una experiencia de sanación, de crecimiento en amor y de evolución en conciencia.

 

Te acompañaré, con mis herramientas y mi presencia, en tu proceso, en tu duelo, a tu ritmo, y abriremos el corazón.

 

 

 

Por una serie de sincronicidades, en 2011 decidí crear un taller para acoger y reconocer amorosamente el hijo / a no nacido. Y así lo ofrecí durante un tiempo y conservo un gran recuerdo de la solemnidad con que madres y padres (que puede que ni se habían atrevido a ser merecedores de este nombre) reconocían con el corazón abierto esta alma que no había llegado a ver la luz del sol.

Actualmente doy gracias por la evolución amorosa de muchas personas que ya atienden este duelo y reconocen la necesidad de continuar poniendo mirada, visibilidad, nuevos protocolos en el ámbito sanitario, diálogo en el ámbito social y familiar.


bottom of page